¿Puede la IA ayudarte a evitar el estrés laboral?

¿Alguna vez te has asustado al ver el tiempo de uso que haces de tu móvil?

Si lo has mirado, seguro que sí.

Es casi seguro que te has sorprendido y preguntado inmediatamente: “¿de verdad he usado tanto el móvil?”.

Pues en esta época de la incapacidad de inconexión, donde estar sin cobertura te puede generar estrés (a ti y a los tuyos, pero quizás y sobre todo a tu jefe), el móvil no es una herramienta de trabajo. Nuestro terminal telefónico se ha convertido en una cadena invisible que te ata en corto.

Las señales evidentes de tu esclavitud

Ya no es trabajo desde casa, son las videollamadas interminables y urgentes que no pueden esperar, pero que se podrían haber arreglado con un email. Es el compañero que no sabe en qué día vive ni recuerda que le dijiste que el sábado te ibas a Tarifa a descansar.

El estrés laboral ha dejado de ser algo ocasional para convertirse en un compañero desagradable y permanente. Es el amigo pesado del que no puedes desembarazarte.

Y aquí es donde entra la pregunta: ¿puede la Inteligencia Artificial (IA) echarte una mano antes de que te dé un colapso?

¡Spoiler alert!

Quizás sí, pero también hay algo de ciencia ficción en todo esto.

Rodolfo Ramos Álvarez — *Tu cadena de esclavitud*

¿Cómo detecta la IA el estrés laboral?

Podría decirte que por el tamaño de tus ojeras y lo asquerosamente irritable que estás, pero vamos a intentar hacer de esto algo más serio. Imagina esta situación: estás tecleando como loco, tu bandeja de entrada es un campo minado, y ya has dejado de contar cuántas reuniones tienes esta semana. De repente, recibes una notificación en tu pantalla: “Parece que estás agotado, ¿qué tal si tomas un descanso?”. No es tu jefe, no es tu pareja preocupada, ¡es tu asistente virtual!

Al ser una IA no tiene miedo de que la despidan por mandar a descansar a un trabajador. Juega con ventaja. Los sistemas de IA pueden analizar un sinfín de datos, desde la cantidad de correos electrónicos que envías hasta cómo interactúas en tus videollamadas. Incluso pueden observar el tono de tu voz para detectar signos de fatiga o estrés. De hecho, algunas herramientas ya están empezando a implementar esta tecnología para detectar cuándo alguien está al borde de un burnout.

¿Deberíamos confiar en la IA para prevenir el burnout?

A favor:

La IA no solo puede vigilar tu productividad, sino que también puede ayudarte a identificar esos momentos en los que deberías bajar el ritmo. Por ejemplo, si llevas horas trabajando sin pausa, un algoritmo bien diseñado puede recomendarte que tomes un descanso, te estires o salgas a tomar un café (sí, te lo mereces).
Al analizar el tono de voz y la duración de tus pausas, la IA puede detectar si estás siendo menos sociable o si tu estado emocional está cambiando, y así advertirte antes de que tu nivel de estrés llegue a niveles críticos.

En contra:

Pero cuidado, que esto no es todo color de rosa. ¿Te imaginas que tu IA te diga: “Necesitas vacaciones” y luego se lo cuente a tu jefe? Aquí entra la cuestión de la privacidad. Que la IA analice nuestro comportamiento puede ser útil, pero también invasivo. ¿Dónde queda la línea entre ayudarte a ser más eficiente y controlar cada movimiento que haces?

Los límites éticos

Si bien es cierto que la IA puede identificar patrones que indiquen que estás al borde de un ataque de nervios, el verdadero reto es cómo se manejan esos datos. No querrás que tus momentos de estrés se conviertan en la nueva moneda de cambio en la oficina. Además, ¿cómo se asegura que los algoritmos no estén reforzando sesgos o tomando decisiones erróneas?